El cometa Elenin fue descubierto en diciembre del año pasado por el astrónomo ruso Leonid Elenin, quien estimó que tenía un tamaño total – entre cabeza y cola- de 5 mil kilómetros, es decir, tiene el porte de dos Lunas.
Este cuerpo celeste sería una curiosidad astronómica más si no fuera por un inquietante video que circula a través de mails y redes sociales, que le carga a Elenin los últimos desastres naturales que han ocurrido en la Tierra.
Una infografía que -según el relator del video-, habría salido de la Nasa muestra que la alineación de Elenin con la Tierra y el Sol provoca terribles guaracazos.
De acuerdo a esa información, el zangoloteo que sufrimos en la madrugada del 27 de febrero del 2010 habría sido provocado por el extraño cometa, cuando pasó a 6 AU (distancia de la Tierra al Sol) de nuestro planeta.
Lo más cuático, es que el peligroso paseo de Elenin por el firmamento no se chanta.
Según la misma fuente, este año el cometa volvería a alinearse con la Tierra el próximo 27 de septiembre, pero esta vez, Elenin habría acortado distancia y estaría a sólo 0,3 AU.
Pa’ más recacha, el 17 de octubre de este año, el cometa por poco nos rayará la pintura, ya que pasará a sólo 0,2 AU, es decir, se podrá lorear hasta con unos binoculares.
Pero según la voz del video, la fecha más compleja sería el 5 de noviembre, porque se produciría una nueva alineación Elenin-Tierra-Sol a sólo 0,3 AU. ¡No quedará otra que encomendarse al Pulento!
Pero la cosa no termina. En otros sitios se informa que si aún nos queda planeta, la última alineación que tendríamos con el cometa del terror sería el 21 de diciembre del 2012. Sí, la misma fecha que los mayas predijeron para cuando quede la tendalá.
Como quedamos más cachudos que venado gorreado, hablamos con el profesor Hugo Zepeda, quien se peina con toda clase de predicciones apocalípticas.
Lo primero que dijo el máster es que pese a todo lo terrorífico que esto suena, no debe cundir el pánico entre la gallá.
«Es cierto que estos fenómenos cósmicos pueden afectar a la Tierra, lo mismo que la Luna influye en las mareas…, pero creo que todos estos fenómenos son una advertencia para la gente, para que cambie su actitud», dijo Zepeda.
– ¿No le parece raro que el último avistamiento coincida con la fecha que aparece en el calendario maya?
– El calendario maya es un calendario cíclico de 5 mil 125 años y el 21 de diciembre del 2012 es el fin de uno de esos ciclos, pero eso no quiere decir que se venga el fin del mundo, sino más bien habla del final de una era. La gente no tiene por qué asustarse…
– Pero, ¿no tendrá algo que ver? Dicen que los mayas eran excelentes astrónomos…
– Eso es totalmente cierto. Pero de acuerdo a sus observaciones, en esa fecha estaremos mirando el centro de la galaxia detrás del Sol y con Sagitario detrás. Eso ocurre cada 26 años. Pero, repito, los mayas nunca hablaron del fin del mundo… sino que del fin de un ciclo, cosas que la gente tiende a confundir.
– O sea, podemos respirar tranquilos…
– Más bien diría que hay que conservar la calma y cambiar la actitud que tenemos, con nuestros semejantes y con el planeta. Creo que la Tierra está muy inestable por todo el descuido que tenemos los seres humanos con el medio ambiente. Tenemos que ser más solidarios entre nosotros y con nuestro entorno, para que seamos una sociedad mejor.
Por Isabel Arrieta Montanares via La Cuarta